El régimen que prioriza el interés espurio sobre los intereses difusos, es la política que queremos erradicar por el bien del ciudadano. Las misivas oportunistas no resolverán los problemas que cercenan las libertades y derechos de los ciudadanos y habitantes de esta República, sino que agravan más aún el orden y la construcción de la paz social.
Queremos acabar con el desentendimiento, pero no podemos permitir que se sojuzgue a aquel cuyos derechos están siendo conculcados. Esto es un atropello al sistema republicano y a la democracia que muchos conmemoran; pero que pocos la practican.
No es propio de la ética ciudadana tomar causas nobles con el fin de utilizarlas para conveniencia propia; menos aún si tiene un propósito electoral. La responsabilidad de los legisladores de defender los intereses partidarios, son ajenos al interés superior de los ciudadanos. Es una obligación del legislador, representar y defender los derechos e intereses comunes de la ciudadanía. Es el pueblo quien ocupa el rol vital de mandantes ante los mandatarios, quienes son los funcionarios públicos electos y selectos.
Es por ello, que no aceptaremos misivas oportunistas que busquen generar conflicto a través de la chabacanería. La mendacidad es una patología social que repudiamos como ciudadanos por deber cívico, ético y moral.
Es importante instalar la cultura del trabajo que dignifica al hombre, antes que la cultura del juego que promueve la ruindad moral y social. La Ciudad de Vicente López no está preparada para dar apertura al juego de azar, ya que no junta los requisitos necesarios como sociedad para que dicha industria se ejerza moderadamente y con un fin comunitario. El propósito del entretenimiento es divertir al hombre, y no avasallarlo. No permitiremos jamás que las falacias confundan al pueblo.
Lamentablemente, ciertos mandatarios han confundido su rol y se han olvidado de su juramento. La ley que reglamenta la creación de bingos y casinos, no necesita de una modificación para que estos puedan existir. Es contradictorio asumir que dicho asunto presenta características abstractas, encontrándose fuera de la agenda parlamentaria, cuando ciertos individuos intentan con ahínco plantear este tema, como si ya hubiera sido resuelto por las autoridades. La voluntad general de la ciudadanía debe ser expresada y no cercenada.
Lic. María Julieta París Duprat
Coordinadora de la Nueva Generación de la Coalición Cívica
Sr. Guido Ezequiel Carera
Secretario de Comunicación de la Nueva Generación de la Coalición Cívica
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