La Coalición Cívica vinculó a Uberti y Capaccioli con el dinero sucio.
La agrupación de Elisa Carrió impulsó la creación de una comisión parlamentaria que investigue el financiamiento de la campaña presidencial de Cristina Kirchner.
Para los diputados de la Coalición Cívica, lo ocurrido con la valija de Antonini Wilson no es un hecho aislado. Lo definen como un suceso que encubre negocios sucios. Negocios que, afirman, terminan financiando al gobierno nacional. Encabezados por Adrián Pérez y Patricia Bullrich, los diputados de la agrupación que lidera Elisa Carrió denunciaron ayer que hay dos nombres que se repiten en el financiamiento del kichnerismo. Le apuntan a Claudio Uberti, el funcionario argentino que perdió su cargo cuando explotó el caso de la valija, y a Héctor Cappacioli, superintendente de Servicios de Salud y recaudador de la última campaña presidencial del Frente para la Victoria. En ese punto, el bloque de la Coalición reclamó la creación de una comisión parlamentaria para investigar el origen de los fondos con los que se financió el kirchnerismo.
“Se dijo que (cuando estalló el escándalo de la valija con los 800 mil dólares) Néstor Kirchner gritó ‘que lo traigan a Antonini’. Ahora debe estar gritando que por favor no lo traigan”, afirmó ayer la diputada de la Coalición Cívica Patricia Bullrich. De esta manera, la legisladora hizo referencia a las declaraciones que los principales involucrados en el affaire están realizando en las audiencias que se desarrollan en Miami y cómo éstas complican al gobierno argentino.
La diputada porteña aseguró que después de que estalló el caso “Néstor Kirchner y Hugo Chávez condujeron un enorme operativo de enmascaramiento de los 800 mil dólares que fueron secuestrados en Aeroparque”. Esa maniobra incluía la presentación del venezolano frente a los jueces argentinos. “Tenía que decir que el dinero era suyo, a cambio recibiría 2 millones de dólares y además el gobierno argentino y el venezolano pagarían los intereses con los que lo multarían en los Estados Unidos por no tener declarada esa plata”, dijo.
Bullrich advirtió que los kirchneristas tienen motivos para preocuparse por las audiencias que se desarrollan en Miami. “En las 200 grabaciones que el FBI tiene en su poder, el abogado venezolano Moisés Maionica dijo que el ministro Julio De Vido iba a su casa cada vez que pasaba por Venezuela”, afirmó la diputada.
Los legisladores defendieron la creación de una comisión investigativa por los “escasos avances que tiene la causa judicial en la Argentina”.
La Coalición cuestiona los fondos de campaña y sospecha que el listado de aportantes es mentiroso. Consideran que esas listas son un método para blanquear dinero proveniente de otros negocios. Aquí es donde también cuestionan a Uberti y la diplomacia paralela que el ex funcionario desarrolló con Venezuela.
“Uberti es el recaudador de los Kirchner no desde ahora sino desde siempre. En todos los negocios participaba Uberti. Hay mucha plata vinculada con el cohecho”, destacó Pérez, jefe de la bancada de la Coalición Cívica en la Cámara baja.
Los “cívicos” esperan que otros bloques los apoyen en su cruzada investigativa. Incluso les piden a los seguidores de Julio Cobos que no consientan en silencio la sospechas que recaen sobre el origen de los fondos que tapizaron el ascenso de la fórmula presidencial.
Adrián Pérez: “Capaccioli no puede permanecer ni un minuto más en el cargo”
Los diputados de la Coalición Cívica le pidieron un gesto a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Nada más y nada menos que la renuncia de Héctor Cappacioli, superintendente de Servicios de Salud. En el mismo acto en el que reclamaron la creación de una comisión legislativa para investigar los fondos con los que se financió el kirchnerismo, el diputado Fernando Sánchez recordó que “la ministra de Salud, Graciela Ocaña, dijo que las empresas –investigadas a raíz del triple crimen y sus vínculos con el narcotráfico– forman una verdadera mafia”. Esto motivó que el titular del bloque, el diputado Adrián Pérez, afirmara que “Cappacioli no puede permanecer un minuto más en un cargo público”.
En el análisis de los integrantes de la Coalición Cívica, los fondos con los que se financió el oficialismo en la última elección tienen tres “puntos sucios”: Los 800 mil dólares que venían en la valija del venezolano Antonini Wilson, la plata aportada por las empresas vinculadas con las droguerías y a las farmacias que importaban efedrina, de las que se sospecha que forman parte de un red de narcotráfico, y los fondos de Santa Cruz. Los mismos que Néstor Kirchner había sacado del país, que el gobernador Daniel Peralta dijo que repatrió y depositó en un Fondo Fiduciario del que no entregó ningún dato concreto.
Al apuntar contra Cappacioli, el diputado Sánchez afirmó que “no sólo no controló las empresas que estaban bajo su responsabilidad, sino que además les pedía dinero para la campaña electoral”.
El legislador afirmó que el tema debe ser investigado por los tres poderes del Estado. Sobre la Justicia se limitó a señalar que le habían acercado la información de la que disponían.
A la hora de hablar del Gobierno, Sánchez señaló que financió la campaña con dinero proveniente del narcotráfico y del crimen organizado, afirmó: “Éste es un gobierno de negocios, de negocios ilegales”.
Los radicales piden explicaciones
El titular de la UCR, Gerardo Morales, sostuvo que “es imprescindible que el gobierno argentino dé una explicación o, por lo menos, niegue, lo que sostuvo el fiscal Thomas Mulvihill en el juicio sobre las afirmaciones de que las valijas que traía Antonini Wilson con 800 mil dólares eran para la campaña de Cristina Kirchner”. “El silencio oficial –concluyó en un comunicado el dirigente del radicalismo– confirma nuestras denuncias sobre la obstaculización sistemática en el esclarecimiento del caso.”
Para los diputados de la Coalición Cívica, lo ocurrido con la valija de Antonini Wilson no es un hecho aislado. Lo definen como un suceso que encubre negocios sucios. Negocios que, afirman, terminan financiando al gobierno nacional. Encabezados por Adrián Pérez y Patricia Bullrich, los diputados de la agrupación que lidera Elisa Carrió denunciaron ayer que hay dos nombres que se repiten en el financiamiento del kichnerismo. Le apuntan a Claudio Uberti, el funcionario argentino que perdió su cargo cuando explotó el caso de la valija, y a Héctor Cappacioli, superintendente de Servicios de Salud y recaudador de la última campaña presidencial del Frente para la Victoria. En ese punto, el bloque de la Coalición reclamó la creación de una comisión parlamentaria para investigar el origen de los fondos con los que se financió el kirchnerismo.
“Se dijo que (cuando estalló el escándalo de la valija con los 800 mil dólares) Néstor Kirchner gritó ‘que lo traigan a Antonini’. Ahora debe estar gritando que por favor no lo traigan”, afirmó ayer la diputada de la Coalición Cívica Patricia Bullrich. De esta manera, la legisladora hizo referencia a las declaraciones que los principales involucrados en el affaire están realizando en las audiencias que se desarrollan en Miami y cómo éstas complican al gobierno argentino.
La diputada porteña aseguró que después de que estalló el caso “Néstor Kirchner y Hugo Chávez condujeron un enorme operativo de enmascaramiento de los 800 mil dólares que fueron secuestrados en Aeroparque”. Esa maniobra incluía la presentación del venezolano frente a los jueces argentinos. “Tenía que decir que el dinero era suyo, a cambio recibiría 2 millones de dólares y además el gobierno argentino y el venezolano pagarían los intereses con los que lo multarían en los Estados Unidos por no tener declarada esa plata”, dijo.
Bullrich advirtió que los kirchneristas tienen motivos para preocuparse por las audiencias que se desarrollan en Miami. “En las 200 grabaciones que el FBI tiene en su poder, el abogado venezolano Moisés Maionica dijo que el ministro Julio De Vido iba a su casa cada vez que pasaba por Venezuela”, afirmó la diputada.
Los legisladores defendieron la creación de una comisión investigativa por los “escasos avances que tiene la causa judicial en la Argentina”.
La Coalición cuestiona los fondos de campaña y sospecha que el listado de aportantes es mentiroso. Consideran que esas listas son un método para blanquear dinero proveniente de otros negocios. Aquí es donde también cuestionan a Uberti y la diplomacia paralela que el ex funcionario desarrolló con Venezuela.
“Uberti es el recaudador de los Kirchner no desde ahora sino desde siempre. En todos los negocios participaba Uberti. Hay mucha plata vinculada con el cohecho”, destacó Pérez, jefe de la bancada de la Coalición Cívica en la Cámara baja.
Los “cívicos” esperan que otros bloques los apoyen en su cruzada investigativa. Incluso les piden a los seguidores de Julio Cobos que no consientan en silencio la sospechas que recaen sobre el origen de los fondos que tapizaron el ascenso de la fórmula presidencial.
Adrián Pérez: “Capaccioli no puede permanecer ni un minuto más en el cargo”
Los diputados de la Coalición Cívica le pidieron un gesto a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Nada más y nada menos que la renuncia de Héctor Cappacioli, superintendente de Servicios de Salud. En el mismo acto en el que reclamaron la creación de una comisión legislativa para investigar los fondos con los que se financió el kirchnerismo, el diputado Fernando Sánchez recordó que “la ministra de Salud, Graciela Ocaña, dijo que las empresas –investigadas a raíz del triple crimen y sus vínculos con el narcotráfico– forman una verdadera mafia”. Esto motivó que el titular del bloque, el diputado Adrián Pérez, afirmara que “Cappacioli no puede permanecer un minuto más en un cargo público”.
En el análisis de los integrantes de la Coalición Cívica, los fondos con los que se financió el oficialismo en la última elección tienen tres “puntos sucios”: Los 800 mil dólares que venían en la valija del venezolano Antonini Wilson, la plata aportada por las empresas vinculadas con las droguerías y a las farmacias que importaban efedrina, de las que se sospecha que forman parte de un red de narcotráfico, y los fondos de Santa Cruz. Los mismos que Néstor Kirchner había sacado del país, que el gobernador Daniel Peralta dijo que repatrió y depositó en un Fondo Fiduciario del que no entregó ningún dato concreto.
Al apuntar contra Cappacioli, el diputado Sánchez afirmó que “no sólo no controló las empresas que estaban bajo su responsabilidad, sino que además les pedía dinero para la campaña electoral”.
El legislador afirmó que el tema debe ser investigado por los tres poderes del Estado. Sobre la Justicia se limitó a señalar que le habían acercado la información de la que disponían.
A la hora de hablar del Gobierno, Sánchez señaló que financió la campaña con dinero proveniente del narcotráfico y del crimen organizado, afirmó: “Éste es un gobierno de negocios, de negocios ilegales”.
Los radicales piden explicaciones
El titular de la UCR, Gerardo Morales, sostuvo que “es imprescindible que el gobierno argentino dé una explicación o, por lo menos, niegue, lo que sostuvo el fiscal Thomas Mulvihill en el juicio sobre las afirmaciones de que las valijas que traía Antonini Wilson con 800 mil dólares eran para la campaña de Cristina Kirchner”. “El silencio oficial –concluyó en un comunicado el dirigente del radicalismo– confirma nuestras denuncias sobre la obstaculización sistemática en el esclarecimiento del caso.”
Fuente: www.criticadigital.com
Publicado por: Lic. Julieta París
No hay comentarios:
Publicar un comentario